Ser súper feliz en el matrimonio… ¿Qué os parece? Está bien que seamos sinceros, pero sin pasarnos, en la vida. Porque todo son gestos, gestos y más gestos.
En los matrimonio, en las parejas en general, hay diferentes fases: la de enamoramiento desmesurado, la de pasión, la de control y supervisión, la de los tiras y aflojas, la del hincamiento de rodilla, la posterior de la boda, la de los niños…
Pero, dentro y fuera del matrimonio, se puede ser súper feliz.

- ¡Hombre, Paco! ¿Cómo estás?.. Te llamo porque no se te ve el pelo… ¿Qué tal te va la vida de casado?
- Nunca he sido tan feliz, tío
- Te está escuchando ella, ¿verdad?
- Súper feliz
- Ánimo tío…
Hay mucho mito en torno al matrimonio. Pero mucho, mucho… Tanto que en la mayoría de las ocasiones se convierte en realidad. Y ocurre aquello de que la realidad supera la ficción.
Y este chiste es un buen ejemplo de esas maliciosas conversaciones que suelen tener los hombres -también las mujeres- con sus amigos. O amigas.
Si bien, a la hora de la verdad, todos somos iguales: nos queremos mucho muchísimo. ¿Verdad que sí? Pues eso está muy bien.
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